Este pasado viernes Víctor Novoa vino a clase a darnos una muy interesante charla sobre el dolor y cómo gestionar, desde la educación social en una institución, la salud mental.
Pese a que todo lo que no comentó
Novoa fue de lo más útil, me gustaría reflexionar sobre una frase que dijo. Venía
a ser algo como esta:
“No hay que centrarse en los síntomas
sino en lo que estos quieren decir, lo que hay detrás, lo que los provocan.”
No debemos realizar nuestra tarea
poniendo el punto de mira en los síntomas y diagnósticos, sino que debemos
plantearnos e intentar averiguar qué historia hay detrás, cómo surgió o cómo se
posiciona la víctima ante su propio sufrimiento.
No hay que dejarse llevar por las calificaciones de las instituciones, ya que estas solo justifican y alimentan sus síntomas, mientras el individuo sigue sufriendo.
Trabajar en las instituciones debemos
entender que nuestros movimientos van a estar limitados, pero nuestra tarea debe
de ser encontrar maneras de actuar beneficiosas para los usuarios que no
supongan un despido inmediato pero que – en caso de ser necesario – vayan más
allá de lo que la institución iría.
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